Arte

SOMOS

Este cuadro estuvo durante cinco años en mi trípode, a medio hacer. Pero llegó un día en que por fin supe lo que quería expresar y pude terminarlo en cinco horas.

El negro simboliza el desconocimiento, la oscuridad de la confusión. De la cual nos libran los maestros, ese ramillete de flores, unidos entre sí tan solo con el único objetivo de protegernos.

Los maestros pueden hacer eso porque tienen recuerdos, simbolizados por el verde oscuro de sus tallos. Lo que les hace flexibles en su entendimiento y sobre todo, les hace capaces de no juzgar.

Nosotros, los humanos, estamos representados por esa única flor en medio de un verde esperanza. Esa esperanza que nos mantiene en esta tierra. Somos rígidos, pues nuestro tallo no contiene el verde oscuro del recuerdo, del conocimiento. Creemos, además, que estamos solos. Pero si miramos bien, vemos difusamente que hay muchos de nosotros. Solo que tan alejados unos de otros, que parece que los otros son tan pequeñitos que no existieran. Pero ahí están.

Es más, si nos fijamos bien, a nuestro alrededor veremos un

SOMOS

Este cuadro estuvo durante cinco años en mi trípode, a medio hacer. Pero llegó un día en que por fin supe lo que quería expresar y pude terminarlo en cinco horas.

El negro simboliza el desconocimiento, la oscuridad de la confusión. De la cual nos libran los maestros, ese ramillete de flores, unidos entre sí tan solo con el único objetivo de protegernos.

Los maestros pueden hacer eso porque tienen recuerdos, simbolizados por el verde oscuro de sus tallos. Lo que les hace flexibles en su entendimiento y sobre todo, les hace capaces de no juzgar.

Nosotros, los humanos, estamos representados por esa única flor en medio de un verde esperanza. Esa esperanza que nos mantiene en esta tierra. Somos rígidos, pues nuestro tallo no contiene el verde oscuro del recuerdo, del conocimiento. Creemos, además, que estamos solos. Pero si miramos bien, vemos difusamente que hay muchos de nosotros. Solo que tan alejados unos de otros, que parece que los otros son tan pequeñitos que no existieran. Pero ahí están.

Es más, si nos fijamos bien, a nuestro alrededor veremos un “algo” que nos rodea. Es nuestro campo vibratorio, es nuestra protección. Es exactamente igual al del planeta que está allá en el cielo. Tan lejos… pero tan cerca a la vez.

Ese planeta con sus lunas, que nos recuerda de dónde venimos y que siempre está a nuestro lado. Protegiéndonos con su energía, invisible a nuestros ojos pero tan real como que estamos aquí.

Fina Navarro.

Una historia

Una historia

¿Qué esconde tu mirada? No tu gesto, no tu expresión… sino tu mirada.

Mírame y deja que tus ojos me muestren tu historia.

Fina Navarro

El árbol del conocimiento y el castillo de la sabiduría

El árbol del conocimiento y el castillo de la sabiduría

EL CONOCIMIENTO

Con la colaboración de las maestras del Colegio José Alcolea Lacal, logramos hacer entre todas un divertido  mural para la biblioteca.

El árbol simboliza el conocimiento y el castillo, que ofrece los libros, representa la sabiduría.

Abrir la mente de los niños a los libros es asegurarles un futuro lleno de posibilidades.

Fina Navarro

La limpiadora
La limpiadora

Una sonrisa siempre hará que nuestra vida sea más fácil.

Fina Navarro

El Yogui

El Yogui

Quizás podamos juzgar a quienes no entendemos, pero solo bastará una mirada a sus ojos para ver la sabiduría de quien trabaja en su interior.

Fina Navarro

Un paraíso en mi imaginación.
Un paraíso en mi imaginación.

Una de las ventajas de pintar es que puedes quitar los edificios y plasmar como podría ser un lugar hace mucho… mucho tiempo.

Es entonces cuando te encuentras con un paraíso a tus pies.

Bahía de Calabardina en Águilas. Murcia. España.

Fina Navarro